Un taxi adaptado para personas con movilidad reducida se parece mucho a cualquier otro coche adaptado, pero con menos exigencias. Esto es porque la persona para la que está adaptado no va a conducir.
Sin embargo, sí necesita un espacio adecuado para poder viajar. La accesibilidad es clave en todos los transportes y es muy importante que existan taxis adaptados en todas las zonas para garantizar el derecho de desplazarse a las personas con algún tipo de discapacidad. Así se recoge en muchas de nuestras leyes y en este artículo entraremos más en detalle.
Se trata de vehículos adaptados que ofrecen soluciones de accesibilidad y transporte para personas con movilidad reducida. Deben ser tan cómodos y seguros como cualquier otro tipo de taxi.
¿En qué se diferencia un taxi adaptado de cualquier otro taxi?
Los taxis accesibles deben ser mucho más grandes que los taxis convencionales. Normalmente se trata de monovolúmenes o bien furgonetas pequeñas. Esto es debido a que deben tener espacio para transportar, al menos, una silla de ruedas.
Normalmente, la adaptación de estos vehículos permite que la persona que se desplaza en silla de ruedas, pueda viajar sentada en la misma. La parte trasera del coche está modificada para poder transportar a una persona es su silla de ruedas con seguridad. Por ello es necesario tener una rampa o bien un elevador de acceso.
Para esto se exigen también determinadas medidas tanto en la altura como en el ancho del hueco de acceso. También debe haber una altura mínima interior, para que el traslado se realice de manera cómoda. Y la silla debe ir bien anclada para la seguridad en el transporte. La sensación de seguridad debe ser la misma que en cualquier otro asiento del vehículo.
¿Por qué hacer que un taxi sea adaptado?
La movilidad constituye un componente esencial de la calidad de vida de las personas. Se debe garantizar la posibilidad de hacer efectiva la libertad de desplazamiento y esto se consigue a través de crear un transporte público accesible.
En algunas de las normas autonómicas sobre este aspecto, se recoge que la existencia y el adecuado funcionamiento del transporte público constituyen un buen indicador del progreso económico y social de una sociedad. Incluso se menciona el nivel cultural y humano, al favorecer la relación entre las personas con independencia del lugar donde residan.
Con estas bases, tener una flota de taxis que discriminen a las personas por su movilidad es algo que no está en sintonía con nuestro avance social ni tampoco con nuestra legislación, ya que el 5% de los taxis deberían ser accesibles.
Las leyes, tanto estatales como autonómicas, hacen que aumente la seguridad jurídica y la accesibilidad esté cada vez más cerca de ser una realidad. Sin embargo, es conveniente señalar que la realidad no siempre es como en las leyes se espera que sea y son muchos los ayuntamientos que no están cumpliendo las normativas.
Legislación
La Ley 19/2003, de 4 de julio, del Taxi de Cataluña recoge en sus principios la universalidad, la accesibilidad, la continuidad y el respecto de los derechos de los usuarios.
En su norma general dice también que un taxi no puede tener más de cinco plazas. Pero, en el siguiente precepto ya especifica la excepción. Se dice entonces que puede autorizarse que el vehículo tenga una capacidad de hasta nueve plazas, incluida la de la persona que conduce, excepcionalmente y atendiendo a circunstancias relacionadas con las prestaciones y características del vehículo, la accesibilidad para personas de movilidad reducida y las características de la zona geográfica y del propio servicio.
Entre los derechos de los usuarios se recoge, obviamente, que el acceso al servicio debe hacerse en condiciones de igualdad, no-discriminación, calidad y seguridad. También se tiene derecho a acceder al vehículo en condiciones de comodidad y seguridad, estando el conductor o la conductora obligados a ayudar a subir y bajar del vehículo a las personas con movilidad reducida, así como cargar aparatos que los usuarios puedan necesitar para desplazarse en el espacio del vehículo destinado a ello.
También tienen los usuarios a ir acompañados de perros lazarillo u otros perros de asistencia de forma gratuita.
En el Real Decreto 1544/2007, por el que se regulan las condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación para el acceso y utilización de los modos de transporte para personas con discapacidad, se desarrollan las medidas para garantizar y hacer efectivo el derecho a la igualdad de oportunidades de las personas con discapacidad recogido en la Constitución Española en varios métodos de transporte.
En cuanto al transporte en taxi adaptado, es aquí donde se señala que los ayuntamientos promoverán que al menos un 5% de las licencias de taxi correspondan a vehículos adaptados. Serán los titulares de las licencias los que, por norma general, soliciten voluntariamente que su taxi sea adaptado. Sin embargo, si no se cubre el porcentaje señalado, los ayuntamientos exigirán a las últimas licencias que su taxi sea accesible. Aunque, como ya mencionamos previamente, esto no se adapta a la realidad.
Los requisitos para que un taxi sea accesible se recogen en la Norma UNE 26.494 y sus posteriores modificaciones. Las medidas imprescindibles para un viajero en silla de ruedas son las necesarias para que pueda entrar, viajar y salir del vehículo de manera cómoda y segura.
El vehículo tendrá que estar perfectamente homologado. El habitáculo en el que viajará este pasajero estará preparado para que lo haga bien de frente o de espaldas. No podrá hacerlo de manera transversal. También deberá llevar un respaldo con reposacabezas fijo, que deberá estar unido permanentemente a la estructura del vehículo. A su vez, dispondrá de anclaje de la silla de ruedas y un cinturón de seguridad con, al menos, tres puntos de anclaje.
Será obligatorio contar con un escalón si la altura entre la calzada y el marco del umbral de la puerta es superior a 250 milímetros. A mayores, será necesario llevar las tarifas escritas en sistema Braille.
Los taxis adaptados deberán dar servicio de manera prioritaria a las personas con discapacidad. Pero, si están libres, estarán en igualdad con el resto de taxis, pudiendo dar servicio a cualquier ciudadano.
Esta norma no regula exclusivamente lo referente al taxi, sino también a su contexto. En este sentido, las paradas de taxi deberán estar unidas con el entorno urbano a través de vías accesibles.
¿Es más caro un taxi adaptado?
En líneas generales la respuesta es sí. El precio de compra va a ser más alto, por ser un coche más grande y con más especialidades. Cada adaptación puede suponer un incremento del precio.
Sin embargo, es importante destacar varios puntos que pueden hacer esta inversión mucho más rentable que otro tipo de taxi:
- Ventajas fiscales con el IVA súper reducido del 4% en la compra.
- Los taxis adaptados tienen permitido ejercer la profesión durante los siete días de la semana, mientras que las otras licencias exigen que los taxistas descansen dos días.
- Existen ayudas y subvenciones tanto para la adquisición del coche como para la licencia.
- Hay mucha menos competencia, por lo que todas las personas que necesiten un taxi adaptado van a necesitar llamar al que lo esté.
- En el caso de que no lo necesite ninguna persona con movilidad reducida, funciona como cualquier otro taxi.
Adaptar un taxi para personas con movilidad reducida no es una tarea complicada y, contando con los profesionales adecuados, puede no salir demasiado caro. Aunque ya hemos visto que puede ser una inversión rentable.Y, al margen de la rentabilidad, decidir trabajar con un taxi adaptado para personas con movilidad reducida es apostar por la inclusión y la accesibilidad de todas las personas, independientemente de su condición física. Es importante que entendamos que estos taxis tienen una función social muy marcada.
Ayudas para conseguir un taxi adaptado
Existen diferentes ayudas para poder tener un taxi adaptado, especialmente autonómicas. Aunque puede ser que también las haya locales. Asegúrate de hablar bien el tema con tu Ayuntamiento, que es el primer interesado en contar con una mayor flota de taxis adaptados por dos motivos:
- El primero: un mayor número de taxis adaptados se traduce en un mejor servicio de transporte público, así como una protección de los derechos a la libertad de movimiento y derecho a la igualdad de oportunidades de las personas con discapacidad. O, lo que es lo mismo, un mayor cuidado de la ciudadanía.
- El segundo: es que los ayuntamientos son los últimos responsables de cumplir con la exigencia de contar con un 5% de la flota accesible. Probablemente, te darán facilidades para que le ayudes a conseguirlo.
Desde ARC Soluciones abogamos siempre por crear un mundo más justo para todas las personas que formamos parte de él, poniendo el foco especialmente en hacerle la vida más fácil a las personas con movilidad reducida. Por eso, somos expertos conocedores de las soluciones y te asesoraremos en todo momento para ayudarte a que conducir tu propio taxi adaptado sea una realidad.
